El golf algo más que un deporte muy completo, un elemento desestacionalizador

España es, desde hace 40 años, el destino de golf para los golfistas europeos más importante junto con el Algarve.

Hasta hace 20 años prácticamente el único destino ofertado era Costa del Sol. Desde entonces otras zonas como Cádiz, Huelva, Murcia, Alicante, Cataluña, Canarias y Mallorca se han ido sumando a la oferta del turismo de golf, incorporando campos e instalaciones de primer nivel. Con todo, no hay duda de que la Costa del Sol sigue siendo en España el destino favorito por dos buenas razones; es la zona geográfica con mayor número de campos de Golf y allí se ubica uno de los aeropuertos más importantes de España en términos de actividad y de volumen de viajeros.

La temporada de golf empieza a mediados de Septiembre y dura hasta la primera semana de Diciembre para prolongarse de Febrero a finales de Mayo, coincidiendo exactamente con la temporada baja de todos los hoteles, de ahí que sea considerado un factor desestacionalizador de primer orden.

Cualquier oferta de turismo activo y deportivo, de actividad deportiva, es un agente desestacionalizador, pero el que mayor volumen de negocio aporta a nuestro país es sin ninguna duda el golf aunque ahora otros deportes como el ciclismo, están contribuyendo con muy buenas cifras en nuestro país.

¿Qué instalaciones y servicios no pueden faltar en un hotel de golf?

Lo principal y ante todo es tener la posibilidad y la facilidad para que los potenciales clientes puedan llegar, que tengan rápido y ágil acceso a la zona. Existiendo buenas conexiones y comunicaciones aéreas, los destinos se convierten en destinos mucho más interesantes para el golfista nacional y sobre todo para el internacional. Y por supuesto, un Hotel de Golf debe de tener, obviamente, una buena y muy cercana oferta de campos de golf y si es en el mismo hotel mucho mejor.

Una vez que el cliente llega a nuestro establecimiento, debe encontrarse con unas instalaciones adecuados y así como la atención de un personal informado al servicio de un cliente de perfil muy concreto. El cliente de golf es un cliente que durante el día practica y disfruta en el campo pero que a la vuelta al hotel, y dependiendo de su país de origen y cultura, necesita tener resueltas las necesidades de ocio complementarias y pueden ser muy diversas; desde una atractiva zona de relax y Spa hasta una original y cuidada oferta gastronómica.

¿Ha cambiado el perfil del huésped de golf en los últimos años?

El acceso digital a la información lo ha cambiado todo. Una información que el cliente busca y usa. Ahora sabe qué campos hay en cada zona, como están en tiempo real de calidad, puede acceder a cualquier campo y conseguir toda la información que necesita, qué hoteles hay cerca, a qué precios, compara con otros portales, se informa de que otras actividades se pueden hacer en la zona etc.
Hace 15 años esto era impensable, el cliente confiaba en su operador, veía un folleto, dos fotos y poco más…ahora sabe perfectamente dónde va, lo que quiere y ya sale de casa con unas expectativas mucho más reales y ajustadas a su gusto personal.

Históricamente el golf es un deporte asociado a un estilo de vida a su vez ligado a un perfil de clientes con una cierta estabilidad financiera, de cierto estatus cultural y social también. Este tipo de golfista busca lugares que ofrezcan campos de golf de calidad pero que también sean desafiantes para poder disfrutar plenamente de la experiencia deportiva, así como del resto de los servicios de hotelería y de la oferta lúdica complementaria de la zona elegida

Pero también, especialmente desde países como Reino Unido, que además es nuestro principal cliente, nos llega una mayor diversidad de perfiles de jugadores, deportistas y clientes. Se trata de un tipo de cliente para quien con toda la información que buscan y consultan y a la que hacíamos referencia en el punto anterior y según también una encuesta realizada por uno de los mayores portales de golf, el factor número uno para decidir a dónde ir es el V4M, es decir, el equilibrio entre calidad y precio, catalogado en un 55% como el factor definitivo a la hora de decidir su destino vacacional y vocacional.

Un 22% vota por jugar campos de calidad y curiosamente, sólo el 5% de los encuestados consideraban «el factor climático» o «zonas de fácil acceso» como motivo más importante a la hora de decidir dónde ir, así que, garantizar Sol y buen tiempo, ya no es suficiente para conseguir ni turistas ni golfistas. Se han dado unos factores en los últimos años que han mejorado la calidad de las instalaciones tanto de campos como de hoteles de Golf en España con la llegada de nuevos inversores a los complejos turísticos.
Esto ha provocado un efecto llamada a grandes fondos de inversión interesados en la compra de productos de calidad para su posterior reposicionamiento.
La inversión en complejos resorts, está provocando que los grandes operadores turísticos pongan máxima atención a los niveles de calidad de sus productos, y consecuentemente comienzan re-direccionar el flujo de clientes siempre y cuando se mantenga el armonía entre Calidad y Precio.

Los clientes apuestan por países con modernas infraestructuras de comunicación, buena relación calidad-precio y sobre todo un clima económico y social seguro para sus vacaciones anuales.

En España, hemos tenido unos años muy buenos, debido a la inestabilidad en zonas de Medio Oriente y África pero las coyunturas cambian y hay que mantenerse competitivos, en mejora continua…buscando la Calidad integral y apostando por la inmersión en experiencias únicas, memorables y personalizadas. La Experiencia debe estar al nivel de las expectativas generadas.

Por lo tanto, apoyo y ayudas para la mejora de las instalaciones, debemos ofertar unos productos que rocen la excelencia en mantenimiento y conservación, con unos servicios acordes con los que se cobra al cliente, y ofrecerle un abanico de oferta complementaria para cubrir las expectativas de cada uno de ellos. Una ocasión perfecta para la colaboración público-privada en la cual ganamos todos.